1. Prende la vela y un incienso para crear tu espacio sagrado.
2. Ponte cómoda y enfócate en tu respiración. Quédate en silencio 5 minutos para conectar con tus emociones profundas y tu poder interno. Estás aquí y ahora.
3. Ahora, escribe una lista de todo lo que te pesa, te duele o te molesta. Déjalo todo en el papel, es hora de dejarlo ir.
4. Decreta en voz alta que cierras un ciclo y empiezas uno nuevo. Libre y poderosa, plena y amorosa.
5. Una vez que termines, quema la lista y sopla las cenizas al viento.
Agradece. Estás renaciendo. Bienvenida.